Infusión de salvia
Para el dolor de garganta y los enfriamientos. Contra los sofocos de la menopausia; contra la transpiración excesiva.
Contra los trastornos digestivos como los gases (flatulencias).
Para una taza de infusión de salvia:
– 1 cucharada de café (de 1 a 1,5 g) de hojas secas de salvia o 2 cucharadas de café de hojas frescas de salvia
Si es posible, triturar las hojas.
Para la sudoración excesiva (hiperhidrosis), la dosis puede aumentarse a 3 g de hojas de salvia secas.
– Aproximadamente 200 ml de agua
– Filtrar
– Calentar el agua hasta ebullición y añadir el agua hirviendo a las hojas de salvia (a ser posible, hojas secas de salvia).
– Dejar infusionar unos 10 minutos (con el fin de obtener una dosis eficaz en sustancias activas).
– Tomar 1 taza varias veces al día en enfriamientos o dolor de garganta (en este segundo caso también se puede emplear la infusión en forma de gargarismo 3 veces al día).
– En caso de sofocos y de transpiración excesiva, esta infusión se puede enfriar en el frigorífico y beberla en forma de infusión o de té frío. Beber una taza por la noche antes de acostarse. En caso de hiperhidrosis generalizada, tomar 3 tés al día.
– Contra las flatulencias (gases) tomar 1 taza de 3 a 4 veces al día.
Observaciones
– Infusión contraindicada en el embarazo.
– Evitar su consumo durante un periodo de tiempo largo (varios meses).
– Según un estudio publicado en septiembre de 2009 en la revista especializada European Journal of Medical Research, el uso de un “spray” a base de equinácea y de salvia contra el dolor de garganta agudo parece ser tan eficaz como la mezcla de chlorhexidina y de lidocaína (un medicamento “químico” clásico utilizado contra el dolor de garganta).
– Contra la sudoración excesiva (hiperhidrosis), los estudios científicos son todavía limitados, como señala la revista americana Prevention en 2019.
Baño de pies a base de salvia
En caso de transpiración excesiva a nivel de pies o de pies malolientes, es posible utilizar esta infusión (preparar 1 litro) en forma de baño de pies. Poner los pies en remojo durante unos veinte minutos.
Leer nuestro informe completo sobre la salvia